Los hechos se dieron al filo de la de las 2 de la madrugada cuando el autobús con número económico 11411 que había salido de la Ciudad de México en horario de 20 horas, a la altura de Marquelia, percibió que la carretera estaba bloqueada con varios troncos, a lo que el conductor de la unidad, aumentó la velocidad y pudo saltar los obstáculos rompiéndosele una llanta trasera, pero como es de patín, ósea, dos llantas traseras pudo continuar su destino hasta llegar a esta ciudad.
Por fortuna sólo quedo en un susto, y el autobús al llegar a la terminal de esta ciudad, se pudo evidenciar que llegó sin una llanta trasera.
Hace un poco más de 20 días, un autobús de la misma línea sufrió un asalto a la altura de Cruz Grande, donde fueron desvalijados, los pasajeros, de sus pertenencias.
Traseras son seis llantas no dos y se le llama técnicamente eje auxiliar dirigible...Y esa ruta nones novedad en este tipo de situaciones delictivas,yo fui operador de Turistar Lujo y en los viajes hacia Huatulco o Puerto Escondido era no detener la velocidad al llegar a un tope de los cientos que existen y ayudan a los delicuentes para actuar...Así que el compañero operador hizo todo lo debidamente humano posible para salvaguardar su integridad física y la de los pasajeros que como siempre si se hubiese concretado el asalto dirían que el operador estaba de acuerdo con los maleantes...
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