INICIATIVA con PROYECTO DE DECRETO paraREFORMAR la LEY DEL SISTEMA ESTATAL DE SEGURIDAD PÚBLICA DE OAXACA; para crear en nuestro estado una POLICÍA CIBERNÉTICA con la finalidad de detectar en la red pública de Internet, los sitios, procesos y responsables de las diferentes conductas delictivas, que se puedan cometer en contra y a través de medios informáticos y electrónicos.
Internet ya no es un fenómeno nuevo, pero sin duda ha revolucionado el mundo tal y como se conocía hace 30 años. Es un fenómeno global, vinculado estrechamente con la comunicación, pero que influye en gran medida sobre casi todos los ámbitos de la sociedad.
En principio, el principal propósito de Internet es la comunicación: permitir al ser humano una comunicación sin barreras, que no tenga en cuenta el espacio, ni fronteras, distancias, sociedades. Internet en sí mismo no comunica, pero es un medio, lo que se llama un canal de comunicación.
El Internet como vehículo no tan sólo de la información, sino de medios para llevar a cabo actos de comercio como compras, rentas, arrendamientos, etcétera, ha propiciado una revolución en el mundo entero.
Las personas frecuentemente necesitamos información para realizar nuestras actividades, y muchas veces la podemos obtener en Internet de manera más rápida, cómoda y económica que en el "mundo físico", de ahí que haya sido comparado al tercer movimiento de cambio de la humanidad, los dos primeros fueron el manejo de la agricultura y el segundo la revolución industrial; por ello se le ha considerado un prodigio para el desarrollo de un gran número de actividades del ser humano, visto de este modo se podría estimar que nada de malo tiene un bien accesible a la humanidad a través de corriente eléctrica y un equipo pc de bajo costo, aunque actualmente hay tantas innovaciones tecnológicas que el Internet corre incluso a través del teléfono celular.
Sin embargo, el Internet también representa un gran reto y problema, nos referimos a que ha sido utilizado cono vehículo para llevar a cabo conductas que han propiciado en el menor de los daños intromisión a la privacidad de las comunicaciones, y en otras situaciones han causado graves daños al patrimonio de las personas e incluso también ha dado pauta; a que individuos conformen bandas de delincuencia organizada que por su nivel de tecnificación han llevado a cabo conductas graves.
En efecto, pese a las infinitas posibilidades que ofrece Internet como infraestructura económica y cultural para facilitar muchas de las actividades humanas y contribuir a una mejor satisfacción de nuestras necesidades y a nuestro desarrollo personal, el uso de Internet también conlleva riesgos.
A través del internet se han cometido diversos tipos de delitos; fraude, pornografía infantil, secuestros, amenazas, entre otros.
Las principales barreras para combatir los delitos en Internet, son la constante falta de legislación, que permita actuar en forma inmediata; la capacidad limitada del cuerpo de policía para actuar debilita las investigaciones y perpetúa la sensación de impunidad; y la falta de conciencia entre la población general sobre seguridad cibernética.
Por ejemplo, la Asociación Mexicana del Derecho a la Información (AMEDI-Capítulo Oaxaca), en el año 2013, alertó que en las redes sociales se descubrió la manipulación de datos e imágenes de mujeres jóvenes de Oaxaca, particularmente de universidades, que son difundidas en blogs de pornografía. Dicha asociación consideró que este “fenómeno” detectado en torno al uso de las redes sociales, particularmente de Facebook, es muy preocupante, sobre todo por los más de 40 asesinatos de mujeres que se cometieron en ese año en la entidad.
Ante este hecho, la Amedi Oaxaca exhortó a las autoridades a discutir esta problemática “desde el ámbito jurídico y legislativo, a fin de sancionarlos, pero sobre todo para generar protocolos de prevención, atención y sanción”.
En nuestro país, para combatir la ciberdelincuencia tenemos una policía cibernética a nivel federal, también existe una en el Distrito Federal, así como en los estados de Jalisco, Yucatán, Guerrero, Sinaloa, Querétaro, Veracruz, Chihuahua, entre otros; sin embargo, en nuestro estado de Oaxaca carecemos de ese cuerpo especializado.
Cabe mencionar que mediante la Cámara de Diputados del Honorable Congreso de la Unión, en el año dos mil diez aprobó dos Puntos de Acuerdo, el primero para exhortar a la Secretaría de Seguridad Pública Federal, y a las Estatales, a los titulares del Poder Ejecutivo Estatal, a los Congresos locales, al fortalecimiento del personal e infraestructura de las policías cibernéticas, así como para exhortar a los Gobiernos Estatales que no tienen policía cibernética a constituirlas a la brevedad posible, a fin de disminuir la comisión de delitos a través del uso de internet.
La Ley del Sistema Estatal de Seguridad Pública de Oaxaca, señala que la seguridad pública es una función a cargo del Estado y de los municipios que tiene como fines salvaguardar la integridad y derechos de las personas, así como preservar las libertades, el orden y la paz públicos, y comprende la prevención especial y general de los delitos.
Por todo ello, es imprescindible realizar una adecuación al marco normativo de la Secretaría de Seguridad Pública, a fin de establecer dentro de las atribuciones de la policía estatal, el monitoreo constante en redes sociales y sitios web en general, para detectar posibles conductas delictivas que se puedan cometer en contra y a través de medios informáticos y electrónicos, función que deberá estar a cargo de un cuerpo especializado denominado POLICÍA CIBERNÉTICA.
En razón de lo anteriormente expuesto y fundado, compañeras y compañeros Diputados, me permito someter a su consideración la presente INICIATIVA con PROYECTO DE DECRETO; por el que se REFORMA la fracción XX (20) del artículo 45 de la LEY DEL SISTEMA ESTATAL DE SEGURIDAD PÚBLICA DE OAXACA; así como se REFORMA la fracción XXXVII (37) y se recorren las demás fracciones del artículo 47, del mismo ordenamiento; para que sea turnada a las Comisiones Conjuntas de Administración de Justicia, y de Protección Ciudadana, para su análisis, discusión y en su caso, aprobación correspondiente.
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